Enfoque

Término utilizado en la enseñanza de lenguas para referirse a las distintas teorías que estudian tanto la naturaleza de la lengua (estructuralismo, funcionalismo, generativismo…) como el proceso de aprendizaje de la misma (conductismo, cognitivismo, etc.). Sobre estos dos aspectos se fundamentan los distintos métodos de enseñanza, que luego se concretan en una serie de procedimientos o técnicas utilizados en el aula. De acuerdo con Richards y Rodgers (1986), tres son las visiones generales sobre la naturaleza del lenguaje que de manera explícita o implícita influyen en los distintos enfoques y métodos:

1. Una visión estructuralista, más tradicional, que defiende que la lengua es un sistema estructurado de unidades lingüísticas con significado. La meta de la enseñanza sería el dominio de los elementos de dicho sistema. Ejemplo: el método audiolingüe.
2. Una visión funcionalista, desde la cual el lenguaje se considera un vehículo para la expresión de funciones comunicativas y categorías nocionales. Ejemplo: el enfoque comunicativo.
3. Una visión basada en la interacción, que considera que la lengua es un vehículo utilizado por las personas para establecer y mantener relaciones sociales. Ejemplo: el aprendizaje de la lengua en comunidad.

En cuanto a las teorías sobre el aprendizaje de lenguas, los distintos enfoques tratan de responder a dos cuestiones fundamentales:

1. los procesos psicolingüísticos y cognitivos implicados en el aprendizaje de la lengua; y
2. las condiciones para que dichos procesos se activen.

De este modo, mientras algunas teorías otorgan mayor importancia al proceso de aprendizaje (formación de hábitos, inducción, inferencia, comprobación de hipótesis y generalización, etc.), para otras lo más importante es la naturaleza del contexto físico y humano en el que se utiliza la lengua.