Seligson, P. 1997. Helping Students to Speak. London: Richmond.
Se utiliza esta clase de ejercicio en la enseñanza de segundas lenguas en el laboratorio de idiomas. La actividad tiene cuatro partes:
- un estímulo que se escucha de una fuente de audio;
- a continuación se proporciona espacio suficiente para que el estudiante pueda emitir y grabar su respuesta;
- el estudiante escucha la respuesta correcta y seguidamente se le proporciona un periodo de tiempo suficiente para que la repita; y, por último,
- el mismo estudiante escucha de nuevo toda la grabación.
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Bibliografía: