Celce-Murcia, M.; Brinton, D. M. & Goodwin, J. M. 2010. Teaching Pronunciation. A Course Book and Reference Guide. New York: Cambridge University Press. 2nd edition.
Referido a elementos fónicos, un rasgo suprasegmental o prosódico es una característica que afecta a unidades superiores al plano segmental (esto es, fonemas vocálicos y consonánticos), tales como la sílaba, la palabra o la oración. Los elementos suprasegmentales son uno de los aspectos de la lengua oral cuyo aprendizaje conlleva mayor dificultad, siendo tanto o más relevantes que los segmentales, ya que la comprensión puede verse afectada, por ejemplo, por el desplazamiento del acento, la incorrecta entonación, o una pausa inapropiada. Los tres aspectos prosódicos que más influencia tienen en la pronunciación correcta de una lengua son el acento, el ritmo y la entonación.
El acento es el contraste entre sílabas tónicas o fuertes y átonas o débiles, que se produce mediante la modulación del tono, la duración y la intensidad. Hay lenguas en las que el acento recae en una sílaba fija (por ejemplo, el francés, en donde recae en la última sílaba de la palabra), mientras que en otras, como el español o el inglés, el acento no tiene una posición fija. El acento puede diferenciar significados, por ejemplo en español dé (forma del verbo dar) y de (preposición), o contribuir a diferenciar categorías de palabras, como en inglés abstract (con acento en la primera sílaba, se refiere al sustantivo “resumen” o al adjetivo “abstracto”; con acento en la segunda, se refiere al verbo “abstraer” o “resumir”).
El ritmo es una sensación perceptiva causada por la sucesión de determinados elementos (acentos, pausas o patrones melódicos) en intervalos regulares de tiempo. Por ejemplo, el ritmo de la cadena hablada en inglés viene dado por la alternancia de sílabas fuertes y débiles en aproximadamente los mismos intervalos de tiempo, como en “My brother’s pool is great”, en donde las sílabas no acentuadas alternan con las acentuadas (pool, great y la primera sílaba de brother).
Finalmente, la entonación es la línea melódica con la que se emite el discurso oral. Está formada por la variación de alturas o frecuencias (vibraciones de las cuerdas vocales) con las que se pronuncian las sílabas que forman las palabras y oraciones, y tiene una importante función comunicativa en tanto que puede expresar matices de significado. La entonación desempeña funciones gramaticales, ya que permite diferenciar entre oraciones afirmativas (Vamos al cine), interrogativas (¿Vamos al cine?) y exclamativas (¡Vamos al cine!). También contribuye desde el punto de vista discursivo a regular los turnos de habla, y permite transmitir matices expresivos o afectivos (miedo, sorpresa, enfado, entusiasmo, etc.).
Existen otros rasgos suprasegmentales como las pausas, la velocidad de elocución o la cualidad de la voz.
Chela-Flores, B. 2003. “Optimizing the Teaching of English Suprasegmentals”. BELLS 12. <http://www.publicacions.ub.edu/revistes/bells12/articulos.asp?codart=31>
Gil Fernández, J. 2007. Fonética para profesores de español: de la teoría a la práctica. Madrid: Arco/Libros.